jueves, 24 de marzo de 2011

Contradicciones etéreas

Yo quiero un tornillo que me juzgue
Quiero uno conciente, sabio, educado
Pero estamos sin tornillo, atolondrados de tal forma
Que nuestro destino yace en el pavimento
Dios olvidó un tornillo
Eso no era parte del plan
Ni parte del experimento álmico
Su mente se estaba desgarrando y caía en la mesa de trabajo
Pero yo ya no quiero un tornillo
Quiero ser más grande que Él
Pues si yo fuese Dios, no olvidaría un tornillo
(Bueno, tal vez olvidaría dos)
Volvería al principio, cuando éramos uno
Y voltearía a ver al ser y nos haría hermoso, perfecto
Con alma de ave y sin cerebro, para poder volar sin compañía
Pero, después de todo, ser destornillados nos da cierto encanto
Y con él, tal vez seríamos aburridos
¿Quién quiere paz mundial?
¿Quién no quiere un genocidio ocasional?
Yo no lloré por no tener tornillo
Sólo me alegro de que no nos falten más.

domingo, 6 de marzo de 2011

Carta de amor para nadie

Anoche soñé que era artista y lo amaba.
Nos gustaba fumar en la cama y bostezar en la iglesia
De su filosofía bajtiniana
De nuestros estornudos sincronizados
Estoy enamorada de quien no existe

Y quiero enrimarte
Y quiero enversarte
Quiero hacer miles de poemas sobre ti
De esos que no se entienden
De esos que no me gustan
Y que la gente los lea y pretenda entendernos

Pero
Después de todo,
tal vez sea yo la que no exista
Porque si tú eres nadie, yo soy nada.

14-Feb-11